“Verdad en Guerra” del pastor John MacArthur. Parte 1.

Notas personales tomadas del libro titulado: “Verdad en Guerra” del pastor John MacArthur. Parte 1.

 

Notas extraídas del libro Parte 1:

• Pareciera que hay una gran cantidad de personas que están dispuestas a matar por una mentira, pero son muy pocos los que están dispuestos a decir lo que piensan de la verdad, y mucho menos morir por ella.

 

• Al estar viviendo en una cultura donde la persecución violenta es casi desconocida, multitudes que se llaman a sí mismas cristianas parecen haberse olvidado del alto precio que muchas veces hay que pagar por ser fiel a la verdad.

 

• El mismo movimiento evangélico debería hacerse cargo por la culpa de la desvalorización de la verdad para satisfacer en las personas la comezón de oír.

 

• Hoy día muchas iglesias conocidas parecen pensar que los cristianos deberían estar jugando en lugar de estar en guerra. La idea de pelear por la verdad doctrinal es lo más alejado de los pensamientos de quienes asisten a la iglesia.

 

• Los cristianos contemporáneos se han propuesto lograr que el mundo los quiera, y por supuesto en este proceso desean divertirse lo más posible. Están tan obsesionados por mostrarles a los incrédulos una iglesia “buena onda” que ni se les puede cuestionar si la doctrina del otro está bien o no.

 

• La fidelidad a Cristo nos lo demanda. El honor de Dios lo requiere. No podemos estar tranquilos y no hacer nada mientras que actitudes mundanas, revisionistas y escépticas acerca de la verdad, se están infiltrando en las iglesias.

 

• Como los fieles cristianos siempre lo hicieron, tenemos que mantenernos de pie, pelear por la verdad y estar preparados a morir por ella.

 

• Necesitamos con urgencia “pastores según mi corazón (dice Dios), que os apacientes (a los creyentes) con ciencia y con inteligencia”

 

• El deber solemne de cada creyente es oponerse a cada ataque hacia la verdad, aborrecer cada mínimo pensamiento de falsedad y no comprometerse en ningún sentido con el enemigo.

 

• Si usted es uno de los que se cuestionan si la verdad es realmente importante, por favor no llame a su sistema de creencia “cristianismo”, porque no lo es.

 

• Nosotros debemos ajustar todos nuestros pensamientos a la verdad (Salmo 19.14), no estamos autorizados a redefinir el término “Verdad” para adoptarlo a nuestros propios puntos de vista, preferencias o deseos.

 

• Todos los que sean condenados en el juicio final serán responsables de rechazar toda verdad que haya estado a su disposición.

 

• La verdad siempre está bajo ataque y es en realidad un pecado no pelear cuando las verdades vitales están siendo atacadas.

 

• Siempre que los enemigos de la verdad del evangelio se infiltren con éxito en la iglesia, los fieles creyentes están obligados a batallar contra ellos.

 

• La indiferencia, la timidez, el compromiso y el no mostrar resistencia son opciones descartadas para los cristianos cuando el evangelio está siendo atacado.

 

• La verdad está bajo un duro ataque y hay muy pocos guerreros con valentía dispuestos a pelear.

 

• Las iglesias tienen la clara tarea de guardar la fe ante los falsos maestros que se infiltran. Cristo mismo lo demanda.

 

• Abandone la definición bíblica de la verdad y el resultado inevitable será la iniquidad

 

• La ampliamente difundida aceptación de la homosexualidad, la rebelión y toda forma de iniquidad  que vemos en nuestra sociedad hoy día es un cumplimiento textual de lo que dice Romanos 1 que siempre pasa cuando una sociedad niega y elimina la relación esencial entre Dios y la verdad.

 

• La verdad y el conocimiento en sí mismos no tienen significado coherente separados de una fuente establecida, llamada Dios. Dios encarna la misma definición de la verdad. Cada pretensión fuera de Él es absurda.

 

• La fe auténtica en Cristo implica amor por su personan y deseo de rendirse a su autoridad. El corazón humano, voluntad e intelecto consienten en el acto de fe.

 

• El mensaje del evangelio en todos los hechos que lo componen es claro, es una proclamación clara, definitiva y confiada de la autoridad de que Jesús es el Señor, y que Él da vida eterna y abundante a todos los que creen.

 

• La Guerra por la Verdad no es una ceguera carnal. No se trata de territorio y naciones. No es una batalla por tierras y ciudades. No es una guerra de claves o un conflicto personal entre individuos. No es un tiro al blanco entre denominaciones religiosas. No es una escaramuza por posesiones materiales. Es una batalla por la verdad. Es por las ideas. Es una pelea por la mente. Es una batalla contra falsas doctrinas, malas ideologías y creencias erróneas. Es una Guerra por la Verdad.

 

• La fe, no las obras, es el único instrumento de justificación. En otras palabras, lo que nosotros creemos en vez de lo que hacemos es lo que nos asegura una postura recta ante Dios, porque nosotros nos asimos de la justicia que justifica sólo por la fe y no por nuestras obras.

 

• No suena bien, pero es la peor forma de crueldad, sugerir que lo que la gente cree realmente no importa demasiado si se sienten espirituales y hacen el bien. De hecho, esa declaración según lo que se ve es una evidente contradicción al mensaje del evangelio.

 

• Tanto la doctrina recta como la vida recta son absolutamente esenciales y totalmente inseparables para el verdadero hijo de Dios.

 

Próximamente estaré publicando más notas que extraje de este libro, así que estén pendientes. Ya puedes leer la Segunda Parte.

John MacArthur es el presidente de TheMaster’sSeminary y pastor de la iglesia Grace Community Church. Sus predicaciones en el programa de radio Gracia A Vosotros son escuchados alrededor del mundo. Él y su esposa Patricia tienen cuatro hijos y quince nietos.

Si quieres leer otros artículos del pastor John MacArthur puedes hacerloen este enlace. También te recomiendo leer las notas que estaré publicando del libro “Esclavo” también escrito por el pastor John MacArthur.

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